Letra de José
Guillermo Batalla y Música de Gómez G. (panameños)
Coro
Mientras haya un
istmeño con vida
y sea timbre de honor
la bondad,
tu memoria será
enaltecida
como símbolo de
calidad.
La desgracia, la
angustia y el duelo
en Ti hallaron la
consolación
Con qué ardiente y
magnánimo celo
palpitaba tu gran
corazón!
El más noble
filántropo fuiste
y el más férvido
apóstol del Bien
y la dulce esperanza
del triste
y del pobre el ansiado sostén.
A tus puertas jamás
llamó en vano
la miseria que causa
terror
Siempre, siempre
extendiste tu mano
Generosa de
benefactor.
Coro
Panamá, mayo de 1933
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